La calefacción por infrarrojos es una tecnología que funciona de forma muy parecida al sol utilizando los rayos infrarrojos.

¿Cómo funciona la calefacción por infrarrojos?

La calefacción por infrarrojos utiliza las ondas emitidas por la radiación infrarroja (calor radiante) para calentar las partículas, objetos y personas que se encuentran a su paso, sin necesidad de calentar todo el aire de la habitación, lo que hace que aumente la eficacia. Estos rayos infrarrojos van rebotando de unos a otros generando un calor agradable en las personas.

Es importante diferenciar los distintos tipos de ondas infrarrojas, ya que cada una de ellas tiene unas características y por tanto un ámbito de aplicación diferente.

Emisiones infrarrojas de onda larga

Las emisiones infrarrojas de onda larga consumen muy poco y calientan de forma paulatina. Los calefactores que funcionan con emisiones infrarrojas de onda larga se utilizan en espacios interiores, ya sea en hogares, restaurantes, oficinas, comercios, etc., y normalmente tienen un diseño moderno para poder integrarlo en la decoración de la estancia.

Emisiones infrarrojas de onda corta

Las emisiones de onda corta emiten luz y alcanzan temperaturas más altas. Los calefactores de onda corta se usan sobre todo en ámbitos industriales, exteriores y zonas que necesitan calefacción instantánea como baños o terrazas de bares exteriores. Emite un calor más directo.

Emisiones infrarrojas de onda media

Las emisiones infrarrojas de onda media funcionan de la misma forma que las de onda corta, con la diferencia de que se usan en espacios exteriores más reducidos.

ONDA CORTA ONDA MEDIA ONDA LARGA
Fuente típica Halógenos, lámparas incandescentes Lámparas de cuarzo Resistencias
Eficiencia energética 92% 60% 40%
Tiempo encendido/apagado 1 segundo 30 segundos 5 minutos
Aplicaciones Terapias de calor, uso industrial, calefacción Uso industrial mayormente Calefacción, secado de pinturas, saunas, etc

¿Cómo es la instalación de estos sistemas de calefacción infrarroja?

La instalación de los calefactores por infrarrojos es bastante sencilla. Normalmente, lo más complicado que hay que hacer es hacer agujeros en la pared o en el techo para colocar el calefactor. Siendo el lugar ideal para colocarlos el techo. Se pueden instalar en exteriores y en interiores y requiere una conexión a la red eléctrica.

Una gran ventaja de estos paneles calefactores es la estética, y es que normalmente tienen un diseño moderno que se integran a la perfección con la decoración de cualquier estancia. Evitamos de esta forma ocupar espacio con aparatos.

¿Son perjudiciales los rayos infrarrojos?

Es importante comentar que los rayos infrarrojos no son perjudiciales para la salud.

Aunque algunos expertos aconsejan no exponerse con frecuencia a las radiaciones infrarrojas de onda corta, porque esta penetra más profundamente en la piel y, por tanto, puede favorecer a la aceleración del envejecimiento de la piel, aunque no tiene efectos adversos directos sobre la salud.

Beneficios de la calefacción infrarroja

Los rayos infrarrojos forman parte del espectro no visible. No tiene efectos negativos sobre los seres humanos, animales o plantas, sino que más bien son beneficiosos.

Los infrarrojos son muy utilizados para mejorar el estado de salud de las personas, en clínicas fisioterapéuticas, hospitales, gracias a los beneficios que producen:

Evitan el movimiento de partículas de polvo y ácaros, debido a que no necesitan circulación de aire. Al calentar las paredes y techos, evitan la aparición de humedades, acumulación de moho y hongos, siendo beneficioso para las personas alérgicas, con problemas respiratorios y asmáticos.

No reseca el aire, por lo que supone un bienestar en las personas con asma, bronquitis o sinusitis.

La radiación infrarroja es muy utilizada para reducir los dolores articulares y musculares, debido a su efecto vasodilatador.

Ayuda a reducir la presión arterial.

Activa a las células y mejora la circulación sanguínea, siendo beneficioso para el sistema inmunológico.

Mejora el estado de ánimo, reduce la ansiedad y el estrés.

Los rayos infrarrojos tienen propiedades antioxidantes y mejora el metabolismo, por lo que tiene efectos antienvejecimiento.

Eficiencia y consumo de la calefacción por infrarrojos

Para la utilización de los sistemas de calefacción por infrarrojos, es importante dimensionar bien la habitación que queremos calefactor, de esta forma conseguiremos que no haya problemas con la distribución del calor. ¡No nos quedamos cortos ni nos pasamos!

Por regla general, los calefactores por infrarrojos tienen una mayor eficiencia energética comparada con los calefactores tradicionales, y por tanto si elegimos el adecuado puede suponer un gran ahorro en el consumo, lo que se expresa en un ahorro de dinero.

Eso sí, debemos tener en cuenta que el consumo del calefactor va a depender de diversos factores; potencia del calefactor, horas de uso, entre otros.

Es recomendable utilizar termostatos para que regulen el funcionamiento del equipo dependiendo de la temperatura de la habitación y ahorremos más, aun así.

¿Ahorran dinero los calefactores por infrarrojos?

El ahorro de dinero va a depender en gran medida de la elección del calefactor adecuado para cada lugar.

Antes de comprar un calefactor por infrarrojos, necesitamos saber cómo es la habitación o estancia que queremos calentar, tener un calefactor demasiado grande para una habitación pequeña puede suponer un desperdicio de energía y por ello, su tamaño es importante a la hora de elegir un tipo de calefactor por infrarrojos u otro. De esta forma, compraremos el calefactor que mejor se adapte a nuestras necesidades, y no desperdiciaremos energía ni dinero.

El calefactor por infrarrojos es genial para ahorrar energía, ya que las ondas infrarrojas no dependen de las corrientes de convección, no calientan el aire y por tanto no necesitan moverlo. La calefacción por infrarrojos, irradia directamente en las personas y objetos que se encuentra a su paso, calentándolos. Esto se traduce en una menor pérdida de calor en la estancia, aunque tengamos ventanas o puertas abiertas, o estemos en el exterior en terrazas, patios, balcones, etc., lo que puede hacer que ahorremos casi un 50% en las facturas de la luz.

 

Ventajas de la calefacción por infrarrojos

La calefacción por infrarrojos es una tecnología que genera un calor muy similar al del sol. Es silenciosa, limpia, inodora, eficiente y rentable produciendo calor instantáneo justo después de conectar el calefactor.

A diferencia de la mayoría de los calefactores que calientan el aire por convección (calientan el aire y lo hacen recircular), la calefacción por infrarrojos transfiere el calor directamente a los objetos o cuerpos. Esta radiación absorbida, se transmitirá nuevamente distribuyendo el calor uniformemente y reduciendo la humedad del ambiente.

En las personas, la radiación infrarroja penetra en la piel calentando desde el interior hacia el exterior. No consume oxígeno, por lo que no reseca el ambiente evitando que se produzca calor sofocante, consiguiendo un agradable clima.

No produce sensación de fatiga. Evita también, el movimiento de partículas de polvo y ácaros, por lo que es muy beneficioso en las personas con problemas respiratorios, asmáticos o alérgicos.

Los calefactores infrarrojos eléctricos son muy útiles para producir calor muy rápidamente; sintiendo en pocos minutos un calor agradable y placentero. Dirige este calor directamente hacia la zona que queremos calentar. Funcionan perfectamente para producir calor instantáneo, sobre todo en aquellas mañanas muy frías, al salir de la ducha o en la oficina. Gracias al rápido calentamiento, se consiguen reducir costes. No requiere mantenimiento ni revisiones o inspecciones, y, además, pueden ser instalados sin un técnico especializado.

En conclusión, la calefacción por infrarrojos es el futuro de la calefacción, de bajo consumo, ecológica y respetuosa con el medio ambiente.

Curiosidades sobre la calefacción infrarroja

Hoy en día, asociamos la radiación infrarroja con la salud, se nos viene a la mente lámparas de infrarrojos para el tratamiento de afecciones de huesos, articulaciones y problemas de piel como el acné. Y esto es una realidad, gracias a la acción de los rayos infrarrojos de calentar los cuerpos desde el interior hacia el exterior, profundizando en la piel unos 6 cm aproximados, llegando incluso a zonas de difícil acceso.

Además de su función en la mejora de la salud, este sistema también se aplica entre otros usos, para la eliminación de humedades en edificios, gracias a su irradiación, emitiendo calor de la misma forma que lo hace el sol. También es una buena alternativa para ser aplicada en invernaderos con problemas de iluminación solar ayudando así a que las plantas puedan realizar la fotosíntesis.

Tiene un uso bastante común en producir calor para animales de sangre fría como lagartos y reptiles, colocando calefactores infrarrojos en los terrarios.

Todos estos aspectos posicionan a la calefacción infrarroja como una buena alternativa para su uso como calefacción habitual, presentando numerosos beneficios para la salud en comparación con los calefactores utilizados habitualmente, y todo ello con un menor consumo de energía gracias a la eficiencia y rapidez con la que comienza a producir calor y colaborando por tanto a mantener la sostenibilidad del medio ambiente. En definitiva, estamos ante la solución para el uso de una calefacción sana, limpia, sostenible y saludable.